15 de abril de 2009
Abriendo rutas
Variante de las Buitreras. El chorro, vía clásica 230 m por Victor Borregero
Sábado 22 empezamos a escalar en cordada de tres Juank Rosi y yo (Víctor).
En los primeros metros de subida, Rosi decide abandonar la cordada debido a que se desprenden dos buenos agarres que tenia, dándole esto malas vibraciones.
Las cordadas siguientes las retomamos Juank y yo, en ellas nos pasaría de todo.
La inseguridad en cada metro que avanzábamos, debido a la descomposición, algún que otro paso duro a mitad de vía, encuentro con un buitre, al que se intento molestar lo menos posible, y lo más preocupante, falta de cuerda en uno de los largos que llego a cincuenta metros. Este percance es el que da nombre a la variante UN METRO NO MAS, ya que es lo único que le hacia falta a Juank y lo único que no le podía dar.
La salida se debió a que nos perdimos de la línea principal (Las buitreras) dando lugar a momentos tensos en la vertical a 180 m y a la nueva variante.
Con la llegada a la cumbre, el club DosH abre un primer episodio en la escalada clásica con esta variante, que, no aconsejamos hacer a nadie.
Seguiremos en la brecha.
Sábado 22 empezamos a escalar en cordada de tres Juank Rosi y yo (Víctor).
En los primeros metros de subida, Rosi decide abandonar la cordada debido a que se desprenden dos buenos agarres que tenia, dándole esto malas vibraciones.
Las cordadas siguientes las retomamos Juank y yo, en ellas nos pasaría de todo.
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La salida se debió a que nos perdimos de la línea principal (Las buitreras) dando lugar a momentos tensos en la vertical a 180 m y a la nueva variante.
Con la llegada a la cumbre, el club DosH abre un primer episodio en la escalada clásica con esta variante, que, no aconsejamos hacer a nadie.
Seguiremos en la brecha.
Excursiones Invernales
Canuto del Veleta. Granada 07.03.09 Por Victor Borregero
Comienza la aventura el Sábado siete. Pedro Juank y Victor salimos del aparcamiento donde dormimos en la furgona, cerca del refugio militar.
Después de dos horas de subida, y encontrarnos con nuestro amigo Nacho (La casualidad de la vida) llegamos al rapel que nos dará acceso al circo del Veleta para poder comenzar esta aventura.
Durante la subida, fuimos castigado por un viento del Nordeste que nos hacia dudar en el poder realizar o no la subida por el Canuto.
Pero todo esto se disipo al llegar al rapel y ver que al otro lado, en el circo, el viento no soplaba.
Realizamos el rapel y después de un pequeño susto con Juank que se precipito cuesta abajo y sin piolet, menos mal que detuvo la caída. Comenzamos el acercamiento al canuto.
Delante de nosotros marchaba un grupo de cinco chavales de Málaga, lo que nos hizo todo el camino más fácil por estar abierta la hulla.
La subida fue espectacular, la nieve estaba increíble tanto en dureza como en cantidad.
La adrenalina la puso una placa de hielo a mitad de pared, de unos cincuenta metros que tuvimos que asegurar.
Después de desmontar la reunión que monto Juank y por la cual subimos Pedro y yo
(Víctor) solo nos quedaba el famoso CANUTO.
Que maravilloso paisaje dejábamos atrás en cada golpe de piolet.
Un Canuto lleno de nieve y roca que hizo cumplir todas las expectativas que traíamos con crece.
Una vez llegado arriba del canuto, solo nos quedaba una travesía y un largo de cincuenta metros. Todo esto no pudimos llevarlo acabo debido a que coincidimos con el grupo que encabezaba la marcha y nos hacían esperar una hora y media para poder nosotros hacer la travesía y largo.
Dimos un rodeo al Veleta, que nos costo una hora y media mas.
No hicimos cumbre, pero si nuestro objetivo del Canuto.
Después de dos hora bajando y llegando al coche a las ocho y media de la noche después de diez hora de pateo. La aventura quedo concluida para el Club Dos H.
Seguimos en la brecha.
Comienza la aventura el Sábado siete. Pedro Juank y Victor salimos del aparcamiento donde dormimos en la furgona, cerca del refugio militar.
Después de dos horas de subida, y encontrarnos con nuestro amigo Nacho (La casualidad de la vida) llegamos al rapel que nos dará acceso al circo del Veleta para poder comenzar esta aventura.
Durante la subida, fuimos castigado por un viento del Nordeste que nos hacia dudar en el poder realizar o no la subida por el Canuto.
Pero todo esto se disipo al llegar al rapel y ver que al otro lado, en el circo, el viento no soplaba.
Realizamos el rapel y después de un pequeño susto con Juank que se precipito cuesta abajo y sin piolet, menos mal que detuvo la caída. Comenzamos el acercamiento al canuto.
Delante de nosotros marchaba un grupo de cinco chavales de Málaga, lo que nos hizo todo el camino más fácil por estar abierta la hulla.
La subida fue espectacular, la nieve estaba increíble tanto en dureza como en cantidad.
La adrenalina la puso una placa de hielo a mitad de pared, de unos cincuenta metros que tuvimos que asegurar.
Después de desmontar la reunión que monto Juank y por la cual subimos Pedro y yo
(Víctor) solo nos quedaba el famoso CANUTO.
Que maravilloso paisaje dejábamos atrás en cada golpe de piolet.
Un Canuto lleno de nieve y roca que hizo cumplir todas las expectativas que traíamos con crece.
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Una vez llegado arriba del canuto, solo nos quedaba una travesía y un largo de cincuenta metros. Todo esto no pudimos llevarlo acabo debido a que coincidimos con el grupo que encabezaba la marcha y nos hacían esperar una hora y media para poder nosotros hacer la travesía y largo.
Dimos un rodeo al Veleta, que nos costo una hora y media mas.
No hicimos cumbre, pero si nuestro objetivo del Canuto.
Después de dos hora bajando y llegando al coche a las ocho y media de la noche después de diez hora de pateo. La aventura quedo concluida para el Club Dos H.
Seguimos en la brecha.
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